Siempre que acaba un año tenemos la tendencia a mirar hacia atrás, analizar el cómo nos ha ido y qué logros o proyectos hemos conseguido. Es algo natural y que nos sirve, no solo para alegrarnos de los conseguido, sino para ayudarnos a centrarnos en lo que queremos o esperamos del próximo año que está a punto de comenzar.

Haciendo un análisis de este 2018, para mi ha sido un año de grandes cambios profesionales, que me han llevado a una gran empresa, con nuevos retos muy ilusionantes y retadores, junto a nuevos compañeros y personas.

Igualmente, he podido conocer a lo largo de todo el año grandes profesionales de los que he aprendido mucho y con los que he podido comentar y contrastar sobre el mercado, la industria del deporte y lo que se espera de él. Cambios.

Si algo se repetía, con independencia de con quien hablarás o en qué sector concreto trabajara, es la palabra cambios. Si a algo nos hemos tenido que acostumbrar, y si no lo hemos hecho, ya lo estamos poniendo en la lista para el 2019, es a los contantes cambios. El mundo avanza muy deprisa, la transformación que está sufriendo la sociedad y numerosos sectores incluso avanzan más rápido que la propia capacidad legislativa del estado (aunque este es otro tema). 

Ante esta avalancha de cambios debemos estar preparados. Debemos tener la capacidad de adaptarnos a ellos y fluir con ellos. Dicho así, parece muy fácil y de manual, ¿verdad? Y tienes toda la razón. Pero no nos queda otra.

Para fluir con los cambios, para ser rápidos y ágiles, debemos disponer de una mente despierta y atenta, fresca y relajada. Y para ello, para conseguirlo con mucha mayor facilidad y empeño, lo que nunca debe faltar es nuestra dosis (diaria o casi diaria) de actividad física. Si algo he aprendido con los años es que, cuantos más cambios tengas a tu alrededor, cuantas más turbulencias aparezcan a lo largo del camino, cuanto más importante sea el día D, con más fuerza te debes aferrar al deporte y a su práctica. El deporte tiene estas cosas, claro que sí.

Por lo tanto, tanto si eres un profesional del siglo XXI, como si eres empresa, acepta los cambios, incluso adelántate a ellos, y recuerda disfrutar del deporte y su práctica como medio para conseguir grandes retos profesionales y corporativos. En esto, no cambies…